… ¡Y de eso no había en mi infancia!

¿Educación del futuro?

Ayer se aproximó a mí mi sobrina, con una serie de interrogantes de matemática de bachillerato, su profesora, a estas alturas no le había explicado qué eran las raices, cómo se sumaban o restaban fracciones y el por qué de las gráficas de funciones …

Luego de un largo rato de explicarle, de correr KmPlot (una herramienta para graficar funciones en GNU/Linux) y Scilab, me apoyo en la cantidad enorme de material en Internet donde le explicaban con claridad de detalle, dibujos y hasta comics, las reglas del máximo común divisor y del mínimo común múltiplo, sobre la raíz y las operaciones inversas y hasta por fín entendió el significado de la precedencia de los signos y el valor absoluto.

¿saben?, ¡eso no lo había en mi infancia!, cual Ray Bradbury yo tenía que ir a la Biblioteca «Pio Tamayo» para poder leer un libro y me hice amigo de los vendedores de libros usados de la plaza Iribarren, en la calle 23 con carrera 19 de Barquisimeto, a donde iba, cada vez que terminaba un libro, a venderlo para comprarme otro, así tuve que cambiar libros como «Sobre Dioses, Tumbas y Sabios» de Seram o mis libros de Nietzsche (extraño mucho «La ciencia jovial»).

En la actualidad, los jóvenes están tan saturados de información, que realmente no se están informando, se descargan un trabajo ya resumido de Internet, le cambian el nombre y listo!, lo peor es que sus profesores, educados en las mismas artes, no son capaces de buscar la fuente …

Bueno, al menos mi sobrina aprendió máximo común divisor …

Artes en evolución …

Me encontraba con en una librería acompañando a mi esposa, cuando esta decide hacerme un regalo, luego de 20 años, decide comprarme un paquete de plastilina (modelling clay), mi sorpresa fue mayúscula cuando al llegar al stand de plastilinas y artes, me consigo con qué lo que antes eran paquetes de 6 colores primarios y negro, ahora se han convertido en multiplicidad de productos, plastilinas doradas, plateadas, cobrizas, de aserrín, de cera, poliméricas acrílicas, con colores fluorescentes, centellantes y brillantes, en cajas de hasta 50 colores, con moldes de ayuda y demás implementos! … y pensar que en mi infancia sólo había esa mísera caja de 6 colores primarios! …

Hay cosas que siempre cambian …

4 comentarios sobre “… ¡Y de eso no había en mi infancia!

  1. Y si supieras.. Hace algunos años, dí clases en el Antonio Jose de Sucre, pedi una monografìa y uno de los muchachos me entrego la impresión de una pagina web.. con el marco del navegador y todo!!

  2. pues si, de esos especímenes llegan mucho al infocentro donde trabajo, mi lugar favorito durante el bachillerato fué la Pio Tamayo, hoy en día trabajo allí, en el infocentro y me da dolor que mientras hacen cola para esperar que se desocupe una máquina a la hora del mediodía (es la hora que se atiende al público, ya que de 8 a 11 y de 2 a 5 hay curso) las diferentes salas tienen, a lo sumo, 4 usuarios. Al menos mis hijos parecen no pertenecer a ésta generación, cómo les encanta un libro, siempre reunen de lo que les doy para irse a la Librería España y buscarse algún libro que les guste y comprarlo.

  3. yo soy modelador de figuras en plastilina. la plastilina se vence y me ha sido dificil conseguir de la normal con que me crie..
    esta entrada que reseñas es extraña, ya que trabajas y abogas por la evolucion tecnologica que da pie a ello.. el mundo del manana nunca sera igual al de hoy porque el hombre tiene tres defectos sin limites: ambicion, modismo y necesidad de algo nuevo.. sabiendo que los tres son banales e innecesarios.. (umm ejemplo calve de modismo es los BB que teniendo 34 apps para oficinal y trabajo solo los usan para chatear o hacer pin)

  4. Nietzsche??? ya lo entiendo todo, jajajajja!! (broma)

    Hablando en serio, el sistema educativo hace ya bastante tiempo, que no esta preparado para enfrentar a sus «estudiantes», y entre comillas porque no creo en esa palabra.
    Asi, las nuevas generaciones tienen cada vez mas y mas tecnologia, mas y mas recursos, pero lo unico que no tienen (o tenemos) es saber aprender…

    Pero claro!!! como se educa al educador?!

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